Y van….! No sé cuantos ¡
(En memoria del asesinado Javier Fernández Quesada
en las escalinatas de la universidad
el 12 de Diciembre de 1977, a manos de la Guardia Civil. Allí estaba yo)
Tu sangre demarrada caía
escaleras abajo
como diciéndonos
que tu vida
se hundía
en la nada…
Tú muerte ¡inútil¡
nos trajo una imagen de LIBERTAD
rota,
manchada, podrida…
Has muerto sin decir nada,
hermano Javier,
como nada dijeron,
Antonio y Bartolomé,
pero tu sangre dejó una huella profunda
sobre losetas cultas y catedráticas
denunciando que no sólo los libros
nos ha de traer paz,
que no sólo bastaba
una HUELGA GENERAL.
Lange Aguiar. Diciembre 1977