VUELA
CANARIO MIO
CANTA Y NO TENGAS MIEDO
Canario, vuela
lejos
y dile a los
cuatro vientos
que tu tierra
está hundida.
Vuela por el
universo
y dile al mundo
que has visto llorar,
humillada,
abandonada,
a la gente de
tus islas.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
No puedes
quedarte quieto
mirando el
sufrimiento
de tus
hermanos,
no puedes vivir
tranquilo
porque tu
pueblo
está siendo
arrasado.
Tienes que
gritar pidiendo auxilio
con tu canto de
amor y de protesta,
con tu silbo de
lucha y entrega.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
No descanses.
Vuela por los
confines
de toda la
tierra
y canta al
humilde,
al pobre, al
tercer mundo…
para que se
enteren
que también
Canarias sufre
el yugo del
opresor.
Silba al rico,
al orgulloso,
al segundo y
primer mundo
para
recordarles su matanza
y opresión con
seres humanos,
que se están
llevando
de nuestras
islas
el trabajo y el
sudor
de muchos
hombres.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
Vuela
porque sólo tú
puedes hacerlo,
pajarillo.
Remonta al
cielo
y pon rumbo a
lo desconocido.
Empieza a
cantar
con tu
melodioso y fascinante silbo
por el inmenso
esperanzador cielo.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
Dile al gorrión
que estás triste,
cuenta al
chogüí tus penas,
habla al
ruiseñor de tus desgracias,
con el colibrí
tu melodía canta,
silba con todas
las aves
tus protestas,
pide ayuda a
todos los pájaros del globo
y canten juntos
nuestros sufrimientos.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
Que tus cantos
griten en los
oídos
del mayor sordo
del planeta,
que tus silbos
conviertan el
mundo
en una lágrima
viviente, sangrante…
Únete canario
al resto de los
pájaros comprometidos
y unidos
lloren, griten
nuestro largo y
fuerte silencio.
Vuela canario
mío,
canta y no
tengas miedo.
Vuela alto, muy
alto
por el infinito
cielo
sin
vacilaciones ni miedo,
silbando
nuestro desesperado llanto,
hasta el día
que el hombre tenga alas
y también
pueda volar,
cantar, silbar
su propia desgracia.
Ese día,
pajarillo,
el hombre
canario
comenzará a
ser libre,
humano,
fraterno…
y sentirá, en
sus entrañas,
el cambio de su
pueblo.
VUELA CANARIO
MIO,
CANTA Y NO
TENGAS MIEDO.
(c)Lange Aguiar, 1974