Disfrutar de nuestros sentidos. Dar rienda suelta a lo que sentimos. Descubir la hermosura de lo que vivimos. Ser trasmisores y receptores de de un mundo más humano, más divino.
Creando, construyendo, disfrutando lo que somos, experimentando lo que escribimos...
Disfruta y crea, ¡TÚ TAMBIEN PUEDES HACERLO!.
Está permitido emocionarse, llorar, reir y, sobre todo SER, COMPRENDER y VIVIR.
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31 ene 2021
¡¡¡EL TODO o LA NADA!!!
28 ene 2021
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Pétalos
Entrega
24 ene 2021
Amor Zurcido
#Dinámica_Que_Me_Inspira_La_Imagen
https://www.facebook.com/groups/1310943719262675/
21 ene 2021
Carta a mi amado amigo eterno
https://www.facebook.com/langeaguiar/posts/744199526213257
19 ene 2021
Soy Bucanero del Atlántico, de unas islas de jardín de sueños
14 ene 2021
Nuevos amaneceres (Imagen CON PARTE DEL POEMA))
8 ene 2021
CARTA DE AMOR
Actividad poética de “amigos y poetas”:
Realiza una carta de amor con estas palabras;
⚘Amor ⚘lejanía ⚘Ternura ⚘ pasión ⚘Ilusión ⚘ latidos ⚘ Vida ⚘ alma
Magia en tu mirada
MAGIA EN TU MIRADA
Siento la magia en tu mirada
de pasión y ternura, dentro de mí
y que logras desbocar de emoción
los latidos errantes de mi loco corazón...
Amor mío.
me pierdo en la profundidad de tus ojos
con esa magia en tu mirada
que llenas de vida mi alma...
Ese sentimiento profundo de amor
que siento por ti
convierte en pequeña mi soledad
en esta desesperante lejanía,
pero... aún estando lejos,
no me vence la melancolía
pues sigo soñando con tu lindo rostro
abrazando con tus ojos mi almohada,
rezando para que se acaben
estos alejados y extraños días
que un virus me separó de ti
pero que sigo sintiéndote
dentro de mi vida
(c)Lange Aguiar
Canarias
4 de Enero 2021. Islas Canarias.
6 ene 2021
NUESTROS ANILLOS DESDE LA ETERNIDAD
EL AMOR ES UN PROCESO QUE NO TIENE FIN,
Y NOSOTROS NO LO TENEMOS,
PORQUE CADA DÍA NOS DESCUBRIMOS;
CADA DIA COMPARTIMOS;
CADA DIA NOS EXPERIMENTAMOS;
CADA DÍA, ES UN AMANECER ETERNO...
NO HA SIDO FÁCIL COMPARTIR,
PERO HEMOS COMPARTIDO.
NO HA SIDO FÁCIL CRECER,
PERO HEMOS CRECIDO.
NO HA SIDO FÁCIL DESCUBRIRNOS
PERO NOS HEMOS DESCUBIERTO...
HA SIDO FÁCIL AMARTE.
HA SIDO FÁCIL ENAMORARME DE TI.
HA SIDO FÁCIL APRENDER CONTIGO.
ES HERMOSO EL SENTIMIENTO
DE TENER NUESTROS HIJOS
DESDE EL AMOR QUE HEMOS VIVIDO...
Y MAS HERMOSO HA SIDO EXPERIMENTAR
EL SER ABUELOS EN ESTA ETAPA DE NUESTRA VIDA...
QUE ESTE ANILLO SEA UN SÍMBOLO DE AMOR
DE NUESTRO ETERNO COMPROMISO
DE VIDA COMPARTIDA, SIN RELOJ NI TIEMPO....
GRACIAS POR SEGUIR EN EL MISMO CAMINO
CAMINO QUE JUNTOS EMPRENDIMOS,
DESDE LA MISMA ETERNIDAD.
COGIDOS DE LA MANO
A PESAR DE TODOS LOS PELIGROS.
TE AMO AHORA Y SIEMPRE.
GRACIAS POR TU SONRISA PERENNE.
(c) Lange Aguiar (6 de Enero del 2021)
2 ene 2021
RECUERDOS (3) EL MEJOR REGALO DE REYES
MI CABALLITO DE MADERA.
Estaba llegando la noche de reyes, y volvía a sentir de nuevo ese malestar en mi estómago, ese enfado injusto que experimentaba en mi interior con esa ¿mágica? ¿ilusionante? Fiesta de Reyes. Hacía ya muchos años que ellos se habían olvidado de nuestra casa, de esa pobre casa a la que nos habíamos mudado unos años atrás y a la que nos había llevado mi padre antes de irse a Venezuela, pues se había arruinado y quedado sin nada debido a las deudas que tenía y a su mala cabeza.
Estaba decepcionado y por eso ese año no quería pedir nada, ¿para qué? me preguntaba. Realmente estaba enfadado con ellos, eran injustos con nosotros, conmigo y con los otros tres hermanos mas pequeños de mi familia y con otros muchos niños de mi barrio. Mis restantes 7 hermanos ya eran grandes, algunos, incluso, ya no estaban pues habían formado sus propias familias.
Para olvidarme de este triste pensamiento animé a mi hermano Tinito a salir a jugar al fútbol con los demás niños y, para hacerlo, nos dedicábamos a hacer un gran pelota de papel y badana para poder jugar con nuestros nuevos compis del barrio. Salimos, jugamos, corrimos, sudamos, nos peleamos con los tres niños del equipo contrario, éramos seis en total, por un gol, pues casi lo hicieron con la mano y eso era trampa. Solo había una portería y sin portero. Jugábamos en el camino enfrente de mi casa. Ellos eran más grandes que nosotros, pero no les teníamos miedo. Al final Terminamos en una riña pegándonos, pero viendo aquella trifulca unos vecinos nos separaron y nos mandaron a cada uno para sus casas. Nos fuimos; doloridos y magullados, a la nuestra sin la pelota de badana. Con toda esta trifulca realmente no habíamos olvidado de que estábamos en navidad y esa noche era la Noche Buena.
Entramos sigilosos y sin quejarnos para no llamar la atención. Mi madre estaba en la cocina preparando la harina para hacer las truchas de navidad...era nuestra mejor tradición navideña: no cenábamos, sólo hacíamos truchas de batata y rosquetes para que nos pudiese llegar hasta el día de Reyes. Mirándonos, con esa mirada amorosa que ella siempre tenía, sin regañarnos, nos dijo: “lávense las manos y póngase aquí con nosotras” Fuimos corriendo a la palangana y nos lavamos las manos como pudimos. A mí me gustaba mucho el olor del aceite caliente y el de la harina. Mis tres hermanas mayores, pues teníamos una hermana mas pequeña que nosotros dos, ya estaban en la faena. Lo que más me gustaba era las figuras que podíamos hacer con la masa de harina preparada. Yo siempre hacia unas pescados, que freía y me los comía calentitos. ¡Que ricas les quedaban las truchas a mi madre!
Así pasamos unas horas, haciendo la masa, estirándola a lo largo de la mesa con una botella... Con una taza hacíamos los cortes para que fueran redondas, las rellenábamos con la masa de batata y pasas que mi madre había preparado y... ¡al sartén! Con los restos hacíamos tiras con las manos que redondeábamos y formábamos rosquetes que también se freían... se les echaba azúcar al sacarlos de las freidoras improvisadas, los calderos de hacer los potajes que se llenaban de aceite y una sartén grande ¡Qué bello momento era ese! ¡era nuestro mejor regalo navideño, y nuestra mejor noche del año! Reíamos, se contaban cuentos, chistes, nos embadurnábamos de harina y, sobre todo, olía a familia.
Pasaron los días, aunque sin olvidarnos de las inocentadas, la noche vieja el año nuevo y la víspera de reyes. Pero, ese año en la noche de Reyes pasó algo extraño que me ha seguido toda mi vida. Me desperté con mucho ruido en la sala contigua a mi habitación y con sigilo me levanté; salí con cuidado y vi a uno de mis hermanos, a Chicho, con mi madre, colocando un gran paquete al lado del belén, que, con gran amor y destreza, él siempre realizaba. No dije nada y alborozado me fui a la cama pensando muchas cosas y, sobre todo, en el gran secreto que se me acababa de revelar. Ya de madrugada desperté a mi hermanito y le dije que al lado del belén había una gran regalo. Nos levantamos y corrimos a verlo, despertando a todos los demás con nuestros gritos. “¡vinieron los reyes, vinieron los reyes,... este año si vinieron los reyes!” Llegaron todos y leímos lo que estaba escrito en el envoltorio, “Para Yaya, Lange, Tinito y Sedes para que jueguen, se diviertan, compartan y se alegren... nos costó encontrar la casa pero por fin ya dimos con ella. Sigan queriéndose mucho. Melchor, Gaspar y Baltazar. Hasta el próximo año y pórtense bien”
Entre los cuatro rompimos el papel que cubría el regalo y de su interior surgió un hermoso caballo de madera ¡¡¡era Un balancín negro!!!. Fui el primero en montarme y que placer sentí al subirme en él. ¡Era nuestro primer regalo en varios años! Después se subió Tinito y en ese momento llegué a donde se encontraban sentados, mi hermano Chicho y mi madre... Estaban emocionados, con lágrimas en los ojos, les abracé y al oído les dije. “Gracias amados Reyes”.
Con el tiempo aquel caballito tuvo ruedas, y con él volamos por los caminos del barrio, eso sí, con muchas caídas y heridas en las piernas. Mi caballito de madera murió de viejo y con él, muchos de mis sueños.
Ese año tampoco faltó el regalo de siempre. Una naranja envuelta en su papelito blanco, la única que comíamos al año, y una jícara de chocolate...
¡Qué año de reyes mas feliz, la de ese año, con un caballo compartido que solo se balanceaba. Un Caballo, que no camello, que vino desvelarme quienes eran los auténticos reyes de la vida! ¡Fue mi mejor regalo, pues no me sentí mal, sino comprendí, con mucha emoción, la ausencia de los otros años al conocer el mayor secreto guardado de ilusiones y fantasía ,... con él crecí y con él aún juego!
Mis hijos y mis nietos siguen jugando con esta ilusión del país de los sueños que no solo vienen de Oriente, sino que viajan en el interior de nuestro Universo, y que vienen acompañados, siempre, por la estrella de nuestro cuerpo.
(c) Lange Aguiar