Dios con El y seguro será una fiesta en el cielo para su acogida. Una grandiosa persona, un enorme ser, un caminar de acción donde el rostro del Padre se hizo presente a través de sus actos, entrega y sonrisas. Regresa en Paz amado amigo del camino y de la vida de amor visible. Una luz enciendo en mi hogar para que tu regreso nos llene de esperanza, que no de tristeza. Abrazos, porque sé que los recibes.
Adiós gran amigo