IN LAK´ECH--HALA KEN

¡ YO SOY OTRO TÚ, TÚ ERES OTRO YO !

Desperté una mañana entre sudores y lágrimas. Un sueño arrebató la tranquilidad de mi vida. La incertidumbre, el desasosiego, el agua que manaba mi cuerpo y el acelerado latido de mi corazón, me hacían pensar que no había tenido un simple sueño. Estaba demasiado inquieto. Lo experimentado no era cualquier cosa, me sobrepasaba. Sentía aún su presencia a mi lado y eso me sobrecogía . Me senté en la cama y traté de respirar profundamente, sintiendo el aire penetrar en mi interior, traspasar mis pulmones y mi estómago. Quería relajarme. Sabía como hacerlo. Mis ojos se pararon un momento y me puse a observar la ventana que se encontraba ante mi cama. Sentí un nuevo escalofrío. A través de sus limpios cristales se asomaban , ruborosos, unos bellos rayos de luz anaranjada. Era el amanecer hermoso de Fuerteventura que penetraba con toda su fuerza, en aquella vieja habitación de madera y piedra. Me quedé absorto contemplando sus rayos de luz envolvente, que aportaron un destello de paz y sosiego en mi despertar. Fue un breve momento, un tranquiizador momento, pues inmediatamente después, seguí sintiendo que el sueño, que había tenido, era demasiado real , demasiado hermoso, demasiado fantástico para ser cierto. La duda se apoderaba de mi mente, los pensamientos me enturbiaban la razón, pero mi corazón parecía decirme que todo había sido verdad... Estaba gritandome, con todas sus fuerzas, que abriera mi conciencia, que dejara mi mente, que no pensara en nada, que solo sintiera lo soñado, que me dejara envolver por lo sentido. que me dejara abrazar por su dulzura y LA VERDAD. Cerré los ojos de nuevo. Quise escuchar desde mi silencio, esa voz interior que gritaba dentro de mi. Paré mi mente. No se como lo hice, pero acallé mis pensamientos. De repente volvió su imagen. Sentí el empuje de su presencia. Su luz me envolvió de nuevo y escuché con toda claridad y con mucha fuerza, una maravillosa voz que hizo vibrar cada una de mi células:

"HOLA MI BIEN AMADO, BIENVENIDO AL MUNDO EN EL QUE SIEMPRE HAS ESTADO. IN LAK´ECH, YO SOY OTRO TÚ, HALA KEN, TÚ ERES OTRO YO . CUMPLE TU MISIÓN EN EL LUGAR FÍSICO EN EL QUE HAS DECIDIDO ESTAR, HACIENDO LO QUE HAS DECIDIDO HACER Y APRENDIENDO LO QUE HAS DE ENSEÑAR. AHORA ES TIEMPO PARA AYUNAR . ES TIEMPO PARA CANTAR Y BAILAR. DEMUESTRA QUIEN ERES. DESNUDA Y MUESTRA TU ESENCIA. YA PUEDES ABRAZAR TU RAZÓN Y TU MENTE CON LA FRECUENCIA DEL AMOR Y LA ESENCIA DE TU CORAZÓN. ALLI ESTÁ MI HOGAR, ALLÍ SE ENCUENTRA TU CASA. ERES SIEMPRE BIEN RECIBIDO. RECUERDA SIEMPRE QUE ERES HERMANO, QUE ERES HIJO."

Emocionado y con un júbilo infinito, abrí los ojos. Reconocía AQUELLA voz. Mi alma sintió su presencia. Mi Ser vibró de alegría. Mi vida se conectó a su frecuencia. Identifiqué y puse nombre a su Esencia. YO SOY, EL QUE SOY, fue mi respuesta. Sentí cómo una bello rayo de luz me abrazaba y acariciaba la cara. Sonreí y supe, desde aquel preciso instante, quien era yo de verdad, qué hacia aquí en la tierra.

¡¡¡IN LAK´ECH!!!!, GRITABA, ¡HALA KEN!, ME CONTESTARON, ALEGRES, LOS RAYOS ANARANJADOS DEL ALBA Y EL VIENTO FRESCO DE LA MAÑANA, QUE FELIZ ENTRÓ EN MI HABITACIÓN, AL ABRIR MI DORADA VENTANA.