CAYÚPATE
Cayó el hombre sobre las olas.
Cayó de espaldas.
Cayó mirando al cielo que desaparecía.
Tragó su negro cuerpo la negra noche que le acogía.
Calló la mar.
Calló la nave.
Calló su hermano
Gritando justicia.
Buscó sus manos.
Buscó su cuerpo.
Sólo tocar pudo
Las Frías aguas escurridizas.
Surcan mi cuerpo
Océanos de silencios;
Mares de esperanzas muertas;
Ríos de llantos negros;
Aguas que me condenan.
Siento el hambre en mi conciencia.
Me caliento con la madera de cayucos y pateras
Mientras me cobijo en mi despensa.
Cayucos llenos de sueños.
Pateras de ruinas llenas.
Olas devolviendo cuerpos
A la codiciada arena de cualquier isla
Del desarrollado MUNDO que les cierra las puertas.
Mundo de fronteras
Que se abren al oro y las empresas,
Mientras crecen y se agigantan,
Alimentando hambres,
Sueños Imposibles, dolor, muerte y tristezas.
Calló la ONU. Calló la libertad.
Murió para muchos la esperanza, los sueños
Ahogados por siempre en los océanos abiertos.
Mares dorados donde moran las sirenas,
Que te atrapan con sus cantos
Y abrazar, hermano, tu cuerpo quisieran.
Mares de gritos silenciosos
que a nuestra orilla jamás llegan.
Olas que abrazan hijos.
Hijos que abrazan sueños.
Sueños que abrazan tierras.
Tierras que tienen riquezas.
Riquezas que se reparten entre otros hijos
que las defienden con muchas guerras,
colocando alambradas a las injustas fronteras.
Cayó el hombre.
Cruzan la tierra
Cayucos de agua,
Pateras de estrellas.
¡CAYÚPATE HOMBRE EN ESTE PLANETA!
LANGE AGUIAR
La Oliva a 19 de Septiembre del 2006
Cayó el hombre sobre las olas.
Cayó de espaldas.
Cayó mirando al cielo que desaparecía.
Tragó su negro cuerpo la negra noche que le acogía.
Calló la mar.
Calló la nave.
Calló su hermano
Gritando justicia.
Buscó sus manos.
Buscó su cuerpo.
Sólo tocar pudo
Las Frías aguas escurridizas.
Surcan mi cuerpo
Océanos de silencios;
Mares de esperanzas muertas;
Ríos de llantos negros;
Aguas que me condenan.
Siento el hambre en mi conciencia.
Me caliento con la madera de cayucos y pateras
Mientras me cobijo en mi despensa.
Cayucos llenos de sueños.
Pateras de ruinas llenas.
Olas devolviendo cuerpos
A la codiciada arena de cualquier isla
Del desarrollado MUNDO que les cierra las puertas.
Mundo de fronteras
Que se abren al oro y las empresas,
Mientras crecen y se agigantan,
Alimentando hambres,
Sueños Imposibles, dolor, muerte y tristezas.
Calló la ONU. Calló la libertad.
Murió para muchos la esperanza, los sueños
Ahogados por siempre en los océanos abiertos.
Mares dorados donde moran las sirenas,
Que te atrapan con sus cantos
Y abrazar, hermano, tu cuerpo quisieran.
Mares de gritos silenciosos
que a nuestra orilla jamás llegan.
Olas que abrazan hijos.
Hijos que abrazan sueños.
Sueños que abrazan tierras.
Tierras que tienen riquezas.
Riquezas que se reparten entre otros hijos
que las defienden con muchas guerras,
colocando alambradas a las injustas fronteras.
Cayó el hombre.
Cruzan la tierra
Cayucos de agua,
Pateras de estrellas.
¡CAYÚPATE HOMBRE EN ESTE PLANETA!
LANGE AGUIAR
La Oliva a 19 de Septiembre del 2006
