Fuerza divina
“A mi eterno niño amigo, a mi propia esencia”
Fuerza viva en tu interior llevas.
Eres León fiero, por la fuerza que demuestras,
por como surcas el cielo inmenso
cazando ideas, creatividad, ingenio y belleza.
Cada noche buscas sueños,
y EL AMOR en tu imaginación moldeas.
Como roca de fuego tu corazón me eleva,
haciendo que un alado ángel
en tu camino una estrella pusiera.
Oro y diamante en tu mirada reflejas
proyectada eternidad encarnada en una bella esfera.
Sintiendo la voz del tiempo en ese eterno niño amigo tuyo
cuya acción tu radiante cuerpo expresa.
Cincela las manos del cosmos a un noble cedro
pues modelado tu cuerpo está
con la más bella y noble madera,
añadiendo a tu vida una vibración nueva,
proyectando la risa que enamora a la tierra,
marcando tus pasos que dejarán profundas sendas,
sintiendo el camino de ahora como la vida eterna
Y que, en un recodo del cielo, un día marcaste tu destino
diseñaste con profundidad tu vereda,
grabando en tu esencia unas sentidas y luminosas palabras,
y dibujaste en tu cara una sonrisa agradable y siempre nueva.
se unieron en el camino a tus huellas,
grabando para ser escuchadas
tus miles y liberadoras letras
convirtiéndote en voz para el mundo,
voz que vibra con la expansiva frecuencia
para ser una voz de vida compartida,
una voz de agua amorosa y tierna,
una gota de voz que busca abrir todas tus puertas
palabras que acarician conciencias
de esta humanidad que se encuentra
en una gigantesca Sala de Espera.
Lange Aguiar 2008